09/03/2022 – 13:50
Las reuniones son uno de esos temas de conversación recurrentes, especialmente ahora que el teletrabajo lleva dos años en auge a causa de la pandemia. ¿Cuántas de ellas son realmente importantes? ¿A cuántas se les dedica más tiempo del que es necesario?
La conversación ha ido seguramente en aumento a causa de que muchas veces las reuniones son vistas como el único método que tienen los jefes o responsables de controlar de forma vívida si sus empleados están trabajando en contraposición al presencialmente de la oficina. Pero, esto va unido muchas veces con una caída en la productividad. Así al menos lo reflejaba recientemente el primer gran estudio sobre el tema.
Desde el MIT Sloan, se han analizado a 76 empresas, con más de 1.000 empleados cada una y que operan en más de 50 países, que han introducido de uno a cinco días sin reuniones por semana (prohibiendo incluso las reuniones individuales) durante los últimos 12 meses. Su objetivo: evaluar el impacto posterior en la productividad, la colaboración y el compromiso, utilizando encuestas de pulso. Y sí, todas salieron beneficiadas en cuanto a productividad tras reducirlas.
Casi la mitad (47%) de las empresas estudiadas redujeron las reuniones en un 40% introduciendo dos días sin reuniones a la semana. El resto de las empresas intentó algo aún más ambicioso: el 35% instituyó tres días sin reuniones y el 11% implementó cuatro. El 7% restante erradicó las reuniones por completo.
El impacto posterior de la introducción de días sin reuniones fue profundo. Cuando se introdujo un día sin reuniones a la semana, mejoraron la autonomía, la comunicación, el compromiso y la satisfacción, lo que se tradujo en una disminución de la microgestión y el estrés, lo que provocó un aumento de la productividad.
Cuando las reuniones se redujeron en un 40% (el equivalente a dos días a la semana), comprobaron que la productividad era un 71% mayor porque los empleados se sentían más capacitados y autónomos. En lugar de estar sujetos a un horario, se hicieron dueños de sus listas de tareas y se responsabilizaron de ellas, lo que aumentó la satisfacción en un 52%.
Aunque pueda parecer contradictorio, la investigación llegó a la conclusión de que celebrar demasiadas reuniones resta eficacia a la colaboración, hace que los trabajadores no estén centrados durante sus horas más productivas e interrumpe el hilo de pensamiento de las personas. En consecuencia, eliminar el 60% de las reuniones -el equivalente a tres días por semana- aumentó la colaboración en un 55%.null
En España, una encuesta revela que también causan rechazo
Al hilo de este mismo estudio, desde LinkedIn Noticias España, se ha realizado una encuesta a los usuarios de la red social profesional.
Y el resultado es claro. A la pregunta «En tu opinión, ¿las reuniones perjudican seriamente tu productividad?», un 72% respondieron que sí, frente a un 28% que dice que no.null
Entre los que se animaron a dar su opinión, un usuario comentaba que «Menos es más. Reuniones de 30 min con uno o máximo dos objetivos… Para ello la preparación para una reunion de 30 min, debes planificarla y prepararla hora y media…vale la pena! Las reuniones de 4 horas con 8 o 10 puntos del día cuando se habla del punto 8 o 9, ¿quién se acuerda del punto 1 o 2?»
Por su parte, otro usuario también recalcaba la importancia de las reuniones en un mundo de teletrabajo. «Reuniones, cenas de empresa, comidas de empresa…. Normalmente como humanos y sociales que somos, solo queremos compartir. La soledad es difícil de llevar en algunos casos, pero si hablamos de rendimiento y concentración , en mi opinión, no hay nada más que hablar».
Fuente: ElEconomista.es