Los recortes del CEO de Tesla, Elon Musk, a la fuerza laboral podrían impactar los proyectos activos de infraestructura de Vehículos Eléctricos (EV) y la implementación de adaptadores NACS después de que los recortes alcanzaran a la unidad Supercharger, encargada del desarrollo de la infraestructura de carga de la compañía.
El estancamiento de los proyectos a futuro y los adaptadores retrasados serían los efectos inmediatos del enfoque “absolutamente duro” del CEO de Tesla, Elon Musk, para reducir costos que ha resultado en al menos 500 despidos del negocio Supercharger de la compañía, incluida la principal ejecutiva de la división, Rebecca Tinucci.
El equipo de Tesla encargado de los Superchargers ha sufrido grandes cambios. Uno de los despidos más importantes fue el de Rebecca Tinucci, directora senior de infraestructura de carga de Tesla. Su salida fue anunciada a través de un correo electrónico enviado a los ejecutivos de la compañía, según lo reportado por primera vez por The Information.
Estos despidos llegan en un momento crítico para la empresa, ya que cada vez más fabricantes de automóviles y redes de carga de terceros adoptan el enchufe NACS patentado por Tesla y obtienen acceso a su red Supercharger. La red de Superchargers de Tesla, que cuenta con más de 10 mil cargadores solo en los Estados Unidos, ha sido una pieza central de su estrategia.
Mientras que los propietarios de otros vehículos eléctricos a menudo enfrentan dificultades con cargadores defectuosos y una infraestructura inconsistente, los propietarios de Tesla disfrutan de una experiencia de carga más fácil y confiable.