Ni el guión cinematográfico más retorcido hubiera podido imaginar un final de partido entre Argentina y la República Dominicana tan lleno de alternativas, cambios, sorpresas y sufrimientos como el vivido este jueves durante su cruce en la fase de grupos de los Juegos Panamericanos de Lima 2019.
Argentina sobrevivió por 102-97 tras un último cuarto de pesadilla, angustioso, en los que los dominicanos liderados por un enorme Adris De León (21 puntos), que no solo anotó, sino que anotó cuando más dolía, reventaron el partido y remontaron una ventaja de once puntos.
Sólo un heroico triple de Luca Vildoza a falta de 5 segundos permitió respirar a los pupilos de Sergio Hernández por primera vez en un cuarto en el que dilapidaron una ventaja de 11 puntos, y en el que estuvieron a punto de ahogarse en varias ocasiones.
Vildoza empató el partido a 87.
En la prórroga, con los dominicanos mentalmente exhaustos, Argentina ya pudo distanciarse levemente para poder reclamar como propia la victoria y de paso asegurarse su paso a las semifinales del campeonato.
El susto no se lo quitará nadie.
Todo empezó dentro de la normalidad. Argentina, con equipo de lujo y el gran candidato al oro, de lejos, se topó con un rival rocoso, peleón, que obligó a buscar fórmulas diversas para poder ser dominado.
No ayudó en ningún momento el bajo porcentaje de anotación de los argentinos, muy pobre. Ni la sensación de pocas revoluciones con la que funcionaba el conjunto.
Hacia el final de segundo cuarto, Hernández pareció encontrarle la vuelta al disponer un cambio en la defensa argentina, que pasó a presionar en toda la cancha y complicar de forma agresiva la subida del balón.
De forma simultánea, también pareció que el desacierto que había imperado en ambos equipos de cara a la canasta se corrigió levemente.
Con todo, una ventaja de seis puntos en el intermedio, que fueron once al final del tercer cuarto, parecía un justo resultado y hablaba de una inevitable victoria argentina.
Pero no.
El cuarto período fue una historia distinta. De León se puso a su equipo al hombro y las rotaciones dominicanas salieron a pelear lo suyo con decisión y entrega.
Y repentinamente, sin que nadie supiera bien cómo ni porqué, los isleños estaban a cinco puntos, luego a tres, luego empatados, y luego por encima en el marcador.
Argentina entró en barrena y nada funcionaba. Hubo un momento, a falta de 3 minutos, que perdían por seis y estaban completamente fuera de juego.
Fueron las faltas personales acumuladas de los dominicanos los que permitieron a Argentina mantenerse pegada al resultado, y eso derivó en un ultimo minuto eterno. De la línea a la banda, de la línea a la banda.
Deck pudo haber simplificado la vida de los argentinos, pero su tarde ante la línea de tiros fue pésima (8 de 15 intentos) y eso ayudó mucho al drama.
Argentina se mantuvo con vida, y eso bastó.
Vildoza agarró una pelota escorada, sobre la banda izquierda y lanzó un triple agónico, hermoso, que entró para ponerle fin a la pesadilla.
El oficio argentino sirvió al final para arreglar el desaguisado, pero aún con escalofríos en el cuerpo.
– FICHA TÉCNICA:
102 – Argentina (21+22+23+21+15): Luis Scola (5), Facundo Campazzo (17), Patricio Garino (8), Marcos Delia (8), Luca Vildoza (12) -quinteto inicial- Gabriel Deck (24), Nicolás Brussino (11), Agustín Caffaro (5), Nicolás Laprovittola (9), Tayavek Gallizzi (3).
97 – República Dominicana (18+19+18+32+10): Gelvis Solano (12), Sadiel Rojas (8), Juan Suero (14), Luis Montero (12), Eloy Vargas (19) -quinteto inicial-, Lionel Figueroa, Marques Townes, Luis Santos (3), Adris De León (21), Brandone Francis, Dagoberto Peña (8), Brayan Martínez.
Árbitros: Luis Vazquez (Puerto Rico). Expulsados por acumulación de personales: Solano, Rojas, Santos, Scola y Laprovíttola.
Incidencias: Partido del grupo B de los Juegos Panamericanos Lima 2019, disputado en el Coliseo Eduardo Dibós de Lima.
