Detrás de un cuerpo tonificado y una buena salud está una dieta saludable. Perder kilos es posible, perder años también. Mucho se habla de los alimentos detox, pero el hígado, por defecto, ya ejecuta una función desintoxicante en el organismo. En una dieta son necesarios los alimentos antioxidantes, aquellos que impiden que las células envejezcan.
En el proceso de rejuvenecimiento están implicadas las vitaminas A, C y B6. Al incluirlas en una alimentación balanceada se obtendrán beneficios, no milagros, lo aclaramos. Pero comer sano está al alcance de nuestras manos y debemos sacarle el jugo a estos alimentos:
Los frutos secos
Por regla, son el sustituto natural de los snacks industriales y también de los ultraprocesados. Los frutos secos tienen un alto contenido de vitamina E, lo que hace que las células ralenticen el proceso de oxidación. Es una vitamina que a nivel celular frena el envejecimiento y, por ende, logra que los síntomas propios de la edad se minimicen.
Pese a estas bondades de los frutos secos, también hay factores que considerar. Causan un efecto aditivo y son calóricos. Los especialistas aconsejan no excederse diariamente de los frutos secos que caben en el puñado de la mano. Tomando en cuenta esta medida aprovecharemos al máximo sus propiedades sin lamentarnos mañana por las calorías.
Las zanahorias
¿Recuerdan el personaje de Bugs Bunny? Nació en 1934, tiene una apariencia impecable ¡y le gustan las zanahorias! Su consumo mejora la visión, esto porque son ricas en betacaroteno, un compuesto químico que se convierte en vitamina A. Es ideal para regenerar la piel y los tejidos.
El betacaroteno hace que los tejidos se mantengan en condiciones favorables y en especial aquellos que tienen contacto directo con el exterior como la piel, los ojos y el pelo. Incorporar las zanahorias a una dieta balanceada contribuye al fortalecimiento de los tejidos y a su renovación.
Los mangos
Esta fruta está considerada como la fuente de los fenoles, los antioxidantes que previenen la caída del cabello. Comer mango fortalece el cabello, lo revitaliza y le aporta un color vivo. Contiene vitaminas A y C que funcionan como antioxidantes y a la vez protegen el organismo de los radicales libres.
El mango es una fruta ideal para potenciar la absorción de hierro, un mineral que se indica cuando hay casos de anemia. Combate los virus, las bacterias, aumenta las defensas en el organismo, conserva el buen estado de músculos y huesos.
Los huevos
Al igual que los frutos secos, los huevos tienen un poco de mala fama debido al colesterol. Sin embargo, está comprobado que no lo aumentan y que, por el contrario, benefician la salud cardiovascular.
En este sentido, el consumo de huevo ayuda a que la piel y el pelo tengan una buena apariencia, más saludable. Los huevos son fuentes de proteínas que, a la par de la vitamina B6, conjugan sus propiedades para mejorar el tono de la musculatura y así prevenir el envejecimiento. Una de las alternativas es añadirlos al champú y a las mascarillas.