El cambio climático es un problema global que puede causar alteraciones en el ecosistema, perjudicando a los seres vivos. Sin embargo, los científicos apuntan a que estas alteraciones en el sistema climático podrían ser beneficiosas para una especie concreta: las ratas.
Así, advierten de que el aumento de las temperaturas podría convertir las grandes ciudades en el hábitat idóneo para que las ratas se reproduzcan. En concreto, Bobby Corrigan de la Universidad de Cornell, es el científico que ha predicho que, para finales de este siglo, se habrá producido un calentamiento global de dos grados Celsius.
Este cambio en la temperatura hará que vivamos inviernos más cálidos y veranos más calurosos todavía, unas condiciones propicias para que las ratas se reproduzcan, tal y como explica el medio Newsweek.
Alertan de la llegada de ratas negras, habituales en ciudades portuarias, a las calles de Madrid
Esto es debido a que las ratas necesitan altas temperaturas, huyen de lugares fríos y húmedos. Aunque pueden vivir cómodamente con unas temperaturas alrededor de 25 grados, en su hábitat perfecto estarían alrededor de 30 grados.
Además, el rápido periodo de gestación de las ratas (14 días) y la capacidad de las crías de empezar a reproducirse con un mes de vida hacen que las ratas puedan producir entre 15.000 y 18.000 ratas en menos de un año.
El aumento de las ratas en las urbes, puede tener efectos negativos para la salud, ya que son portadoras de parásitos y pueden transmitir enfermedades.