El presidente de la República Luís Abinader prometió que la presa de Monte Grande estará lista el 16 de agosto del año próximo y la de Guayubín, dentro de 24 meses.
El mandatario hizo estos anuncios en visitas hechas al sector El Pastor, de Guayubín, donde se construye la presa del mismo nombre y en La Mina, de Azua, donde está siendo construida la presa de Monte Grande.
Presa Monte Grande
Terminada su visita a la presa de Guayubín, en Santiago Rodríguez, el presidente de la República, Luis Abinader, se desplazó hasta El sector La Mina, en Azúa, para dar seguimiento a los trabajos de construcción de la presa de Monte Grande.
“Esta es una idea de décadas para toda la región sur, especialmente en términos de regar muchas nuevas tareas para producción agrícola, contener las inundaciones y convertirla en la fuente de agua para muchas comunidades del sur, incluyendo Barahona”, expresó el mandatario.
El presidente reiteró que asume el compromiso de dar término a esta obra. “Nos comprometemos a que esta presa, después de más de once años, en un año y tres meses, podamos terminar su construcción”, significó Abinader.
La obra, que es supervisada por el Instituto Nacional de Recursos Hidráulicos (INDRHI), está ubicada sobre el río Yaque del Sur. Se trata de una infraestructura pública que acoge un importante y necesario complejo de obras hidráulicas que aportará al desarrollo de la región suroeste del país y su gente.
El jefe de Gobierno estuvo acompañado por Olmedo Caba, director del INDRHI, quien ofreció todos los detalles técnicos.
Así mismo, el gobernante visitó el proyecto habitacional Monte Grande, que beneficiará a 394 familias que sufrían los efectos de las constantes inundaciones en la zona.
Durante el recorrido, estuvieron junto al mandatario, Lisandro Macarrulla, ministro de la Presidencia; Orlando Jorge Mera, ministro de Medio Ambiente, e Igor Rodríguez, Vice ministro administrativo de la presidencia.
También, Hostos Rizik, director del Banco Centroamericano de Integración Económica (BCIE), entidad que ha asumido el financiamiento del proyecto y representantes del consorcio contratista Andrade Gutiérrez y Servinca.
Beneficios del proyecto
La puesta en funcionamiento de la presa de Monte Grande, tendrá un impacto significativo en el desarrollo de la región y la calidad de vida de sus habitantes. Se elevará la producción agrícola, con la irrigación de 18 mil nuevas hectáreas y se mejorarán 25 mil existentes.
Además, se lograrán controlar las inundaciones en la zona y con ello, la vulnerabilidad de tantas familias en sus alrededores.
La presa garantizará suministro de agua a 400 mil personas y elevará la calidad de la producción agrícola de la zona.